Cada día le doy gran importancia a la imaginación que mi mente plasma en mis sueños; algunas veces creo que debería escribir una novela de algunas ideas que me dan. Sin embargo algunos sueños son demasiado misteriosos, otros fantásticos y otros muy gráficos.
Amo a mi novia ... yo la soñé antes de que llegara; pasaba por un momento muy difícil y me la encontré de frente, viéndome con cariño y amor; cantándome; y después se desvaneció entre el frenesí de imágenes que desfilaban durante el psico-viaje.
Recuerdo que lo más interesante es que tiempo después llegó, tal como la había soñado; la ví, físicamente fue muy pero muy parecida al sueño que tuve, dentro del sueño ella era de mi color de piel, de mi estatura, bonita en su rostro y de cuerpo... cuando llegó, yo la reconocí... era ella.
Opino que a veces los sueños se cumplen... si a veces. Sin embargo... ningún éxito es para siempre, más si no se construye en el camino, con todas sus altas y bajas; soy afortunado al lado de ella, es un honor seguirnos construyendo todos los días.
Lo más hermoso de ésta vida es el amor; cultivarlo debe ser algo que debemos tomarnos en serio; no hay lamentos para después.
Impaciente es la palabra para describirnos cuando queremos ser felices, queremos felicidad y dicha instantánea; pero el amor es un platillo que se prepara sin prisas, no se da en macetas, ni de la noche a la mañana.
Nada más hermoso en este mundo más que el amor; nuevamente creo que soy afortunado y le doy gracias a Dios por el privilegio de que seas mi novia.
Así pasen los años, te seguiré amando... mi hermosa Novia.
